El Departamento de Educación y el Public Schools Athletic League (PSAL por sus siglas en inglés) están llamados a crear 200 nuevos equipos en los próximos dos años, como parte de un acuerdo sobre el acceso desigual a los deportes para los estudiantes negros y latinos.

Sneha Dey

Estudiantes de la escuela secundaria de NYC en una manifestación por un acceso deportivo más equitativo en 2018.

Este artículo apareció originalmente en inglés el 29 de marzo. Traducido por Ana Teresa Solá Rivière. Read the original article in English here.     

El Departamento de Educación de la ciudad (DOE por sus siglas en inglés) y el Public Schools Athletic League (PSAL por sus siglas en inglés) están obligados a poner en marcha 200 nuevos equipos deportivos en las escuelas secundarias durante los próximos dos años —como parte de un acuerdo aprobado por un tribunal estatal este mes—, tras una demanda sobre la disparidad de acceso a los deportes para los estudiantes negros y latinos.

New York Lawyers for the Public Interest (NYLPI por sus siglas en inglés) presentó la demanda colectiva en nombre de los estudiantes de la ciudad en 2018, alegando que las políticas de la ciudad para financiar y asignar equipos deportivos de la escuela secundaria violaban la ley de derechos humanos de la ciudad de Nueva York. El documento citó más de 100 escuelas públicas sin equipos deportivos, señalando que los estudiantes negros y latinos tienen más probabilidades de carecer de acceso y la ciudad ha gastado históricamente menos sobre una base per cápita en los deportes para estos estudiantes en comparación con sus compañeros de otras razas y etnias.


“Miles de estudiantes de institutos públicos de la ciudad de Nueva York se beneficiarán de esto”, dijo Jenny Veloz, organizadora principal de Fair Play Coalition de NYLPI, donde los activistas juveniles han hecho campaña para aumentar el acceso durante los últimos años después de notar las disparidades, en particular para las escuelas más pequeñas a las que asisten predominantemente estudiantes de color en comparación con los institutos más grandes. 

“Como alguien que siempre ha amado los deportes, me sorprendió que las escuelas secundarias de la ciudad de Nueva York con la mayoría de los estudiantes blancos tuvieran 44 equipos, mientras que mi escuela solo tenía cuatro”, escribió Matt Diaz, uno de los demandantes en una columna de opinión para City Limits en 2018 cuando era un estudiante de la Urban Assembly Bronx Academy of Letters. Y describió a otro estudiante cuya escuela fue obligada a albergar prácticas de baloncesto en el auditorio, algo como un “gymatorium.”

“La mayoría de los auditorios tienen el suelo inclinado, haciendo que el balón ruede cuesta abajo cada vez que intentan lanzarlo y que tengan que correr cuesta arriba para anotar”, dijo él. “¿Los niños blancos tienen que jugar en un gimnasio?”.

Como parte del acuerdo de la demanda, el DOE y el PSAL están obligados a ampliar el número de equipos deportivos ofrecidos en el marco de su Shared Access Program, que permite a los institutos vecinos jugar en equipos deportivos combinados. El DOE encuestará a todos los estudiantes de las escuelas participantes para ayudar a determinar qué nuevos deportes ofrecer, y debe crear al menos 200 equipos nuevos para el semestre de primavera de 2024, dando prioridad a las escuelas que tienen menos opciones.

“Para nosotros y para este proyecto, va más allá de la propia práctica física del deporte”, dice Veloz, quien señala otros beneficios socioeconómicos de la práctica, como el acceso a becas universitarias, el desarrollo de habilidades de liderazgo y, para algunos estudiantes, una mayor motivación e interés en la escuela.

“El mero hecho de que se les abra esa puerta es tremendo”, afirma. “El deporte le puede dar a los jóvenes una salida si no tienen otras opciones”.

En un comunicado, la portavoz del DOE, Suzan Sumer, dijo a City Limits que la agencia invirtió $6 millones de dólares para la expansión de PSAL. “Estamos comprometidos en proveer acceso equitativo a nuestros increíbles programas de PSAL y poner los deportes en las manos de nuestros estudiantes, cambiando sus vidas”, dijo Sumer. “Los estudiantes de todos los códigos postales tendrán acceso a los programas deportivos de PSAL que apoyan su salud y bienestar”.

46.384 estudiantes participaron en los deportes de PSAL durante el año escolar 2018-2019. En marzo de 2020, el COVID-19 cerró las escuelas y a sus equipos deportivos; la ciudad solo comenzó a permitir que los deportes de la escuela secundaria volvieran en fases durante la primavera de 2021.

La pandemia creó interrupciones similares para el uso de los campos y canchas deportivas de la ciudad, donde los equipos de estudiantes y adultos compiten por el espacio reservado a través del proceso de permisos del Departamento de Parques de la ciudad de Nueva York. El COVID-19 obligó a la agencia a suspender la emisión de permisos en la primavera de 2020, aunque los campos deportivos reabrieron ese verano por orden de llegada.