Después de una bienvenida muy mediática, los solicitantes de asilo soportan las adversidades del albergue

 La ciudad calcula que unos 6.300 solicitantes de asilo han llegado en autobuses desde la frontera en los últimos meses. Además de encontrar un lugar seguro para alojarse, deben acceder a atención médica, hacer un seguimiento de sus casos de inmigración en trámite y, en algunos casos, intentar reunirse con miembros de su familia de los que fueron separados durante el viaje. Algunos han abandonado el sistema de albergues por completo, alegando motivos de seguridad.